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Las fantasías sexuales, su importancia en nuestra sexualidad (Por Nieves Moyano)

“No se pinta con las manos, sino con el cerebro "
Miguel Ángel Buonarroti

De algún modo todo aquello que realizamos es previamente visualizado en el gran escenario de nuestra mente, de nuestra imaginación, aunque en ocasiones no seamos muy conscientes de ello. Así, las fantasías sexuales son el motor que pone en marcha las ganas o el interés sexual, así como favorecer y potenciar la excitación sexual. 
Así comienza la entrada de esta semana con motivo de la visita que he recibido de mi amiga, compañera y gran profesional Nieves Moyano.
Hace unos meses la invité a venir unos días a Jaén para participar de las actividades que como sabéis realizo cada semana tanto en radio como en televisión, ella, sin pensárselo dos veces aceptó.

Para mi ha sido toda una experiencia el compartir esos espacios con ella y su amplio conocimiento de las fantasías sexuales.

La prueba escrita  y su paso por Uniradio Jaén os la  ofrezco en esta entrada, nuestra intervención en el programa Vive la Tarde de Ondajáen la colgaré cuando la tenga disponible.

Sin más me despido esperando que la disfrutéis tanto como yo y creo que os puedo adelantar, que esto, no quedará aquí...

Un abrazo y cuidaros por favor.


Las fantasías sexuales, por Nieves Moyano

Aunque resulta difícil definir qué son las fantasías sexuales, generalmente se considera que éstas son cualquier imagen mental, que para cada individuo tiene algún significado erótico o sexual. Es ahí donde proyectamos y escenificamos todo aquello que se desee: un encuentro sexual con la pareja, con personas desconocidas, relaciones con varias personas a la vez…

 Además las fantasías sexuales también pueden ser experiencias que se han vivido, así como imágenes que aún NO se han vivido y que se desearía llevar a cabo en la realidad o no, simplemente se quedan en ese mundo imaginario y de fantasía.

Entre las principales funciones de las fantasías sexuales, podríamos enumerar las siguientes:

1) Ayudan a estar concentrado durante las relaciones y disfrutar más de ellas.

2) Despiertan el apetito y deseo sexual

3) Fantasear nos permite hacer un ensayo en nuestra mente. Al igual que cuando pensamos o planificamos que vamos a hacer un viaje, comenzamos a pensar en si iremos en coche, la ropa que me voy a llevar, qué voy a hacer, etc… y lo imaginamos y lo comenzamos a vivir con ilusión y expectativas, pensar en sexualidad y recrearnos en ello, también nos hará proyectar ilusión y disfrute en ello.

Para explorar nuestra imaginación es necesario “darse permiso”, aunque en ocasiones las fantasías pueden despertar emociones de culpabilidad, vergüenza. ¿Por qué?:

1) Confundir la fantasía y la realidad, es decir creer que porque se tiene un pensamiento se debe o se quiere llevar a la realidad, cuando en ocasiones pueden ser pensamientos que bien por curiosidad o por exploración escenificamos en nuestra mente pero no deseamos realizarlos.

2) Pensar en otras personas como sinónimo de infidelidad. Otro factor que puede hacer que experimentemos las fantasías de modo desagradable puede ser, el fantasear con otras personas diferentes a la pareja, y que por considerarlo un acto de infidelidad, podría generar malestar o pensemos que no sea correcto.

3) Otros factores como los educacionales, la influencia de la religión, etc, por considerar que determinados pensamientos son sucios o impuros, pueden influir sin duda en el modo en que se experimentan las fantasías.

4) Finalmente, el simple hecho de plantearse si será normal o no lo que pensamos, que suele ser una pregunta que nos acompaña con demásiada frecuencia, puede hacer que experimentemos con malestar las fantasías sexuales.

¿Hay similitudes o diferencias en las fantasías que tienen las mujeres y los hombres?

Generalmente, los hombres, en comparación con las mujeres piensan más en sexo que las mujeres. Esto se ha tomado como indicador de que los hombres son en general más “sexuales” que las mujeres. Sin embargo, ciertos estudios recientes como el realizado por Fisher Moore y Pittenger (2011) en Inglaterra, muestra que los hombres además de tener más pensamientos de tipo sexual, también tienen más pensamientos relacionados con dormir y con comer. Esto podría indicarnos que los hombres sencillamente tendrían más pensamientos basados en sus propias necesidades que las mujeres. Quizás se debe a que hombres y mujeres seguimos procesos de socialización diferenciados, en los que a la mujer se la enseña y sensibiliza para atender las necesidades de los demás y no son capaces de percibir o se conscientes de sus necesidades, sin embargo los hombres están más atentos a sus propias necesidades o pensamientos tanto sexuales como de cualquier otro tipo.

En el contenido…

Las fantasías más comunes tanto en hombres como en mujeres, con aquellas en las que aparece la pareja, aunque las mujeres le dan más valor a los elementos románticos y sentimentales.  Entre las principales diferencias podemos encontrar, que  los hombres suelen tener también más fantasías con personas desconocidas y de sexo en grupo, con varias personas a la vez. Las mujeres suelen fantasear con hombres con estatus, y hombres famosos o a quienes ellas pueden admirar.

Y nos fue dado
un rincón privado
de fronteras permeables…



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